'ESPN' recordó una historia más que jugosa previa a que Brasil se llevara el Mundial de Corea y Japón en 2002. La Selección Brasileña estaba concentrada en Kuala Lumpur y el periódico 'O Estado de Sao Paulo' publicó una información que creó un terremoto: en las habitaciones se habían repartido el llamado "kit del sexo".
Este consistía en una serie de revistas porno para que los jugadores se entretuvieran y aliviaran tensiones previas a los encuentros. Se habrían repartido por todas las habitaciones salvo en la del joven y evángelico Kaká, muy devoto de sus creencias y que llegaría virgen al matrimonio.
La información corrió como la pólvora y enojó volcánicamente a Felipe Scolari, el seleccionador, que de inmediato exigió responsabilidades a la prensa. "No permití la distribución de revistas pornográficas. Vosotros queréis un lío, pero no lo vais a conseguir. Si yo quiero, acabo con vuestra cobertura aquí. ¿Queréis verlo?, ¿apostamos? En un minuto lo consigo", llegó a decir.
La Confederación Brasileña de Fútbol también lo negó. La tensión incluso enfrentó a 'Felipao' con su jefe de prensa, Rodrigo Paiva. Al final, hubo que organizar un 'off the record' con los periodistas que cubrían la información de Brasil para zanjar el asunto.
Sin embargo, pese a los intentos brasileños por hacer ver que fue mentira, incluso algunos futbolistas al tiempo llegaron a reconocer que así había ocurrido. "Si Felipe no lo permite, tendré que comprar una muñeca hinchable", admitió Edílson al cabo de los años, según 'ESPN'.
Lo cierto es que los 52 días de concentración se hicieron largos y, con o sin el "kit del sexo", Brasil se proclamó campeona tras tumbar en la final a Alemania por 0-2 gracias al doblete de Ronaldo.