Dos de los favoritos en esta edición de la Liga de Campeones comenzaron como un tiro sus respectivos compromisos europeos. Ambos fuera de casa. El Barça se adelantó en Praga y el Liverpool en Genk.
Tres minutos tardó Leo Messi en lograr el primero en la cuenta del Barça. El argentino robó en campo contrario, encontró a Arthur entre líneas y se desmarcó de nuevo en el interior del área. El '10' recibió y no perdonó en la definición con pierna izquierda.
Los azulgranas lo celebraron a lo grande. Comenzaron por delante en el marcador muy pronto en uno de esos partidos que se pueden complicar con el paso de los minutos.
El campeón de Europa tardó dos minutos en helar al Genk. Oxlade-Chamberlain, que conducía la pelota, decidió disparar desde la frontal del área al no encontrar respuesta defensiva. El disparo del inglés se coló en la portería de Coucke.
Una buena manera para seguir manteniendo su candidatura para acabar levantando la 'Orejona' a final de temporada.
23 de octubre de 2019