En declaraciones divulgadas en la página web del club, Castillo aseguró que es un "orgullo" formar parte de la plantilla encarnada: "Estar en el Benfica es una gran responsabilidad, pero también una motivación para continuar sumando títulos".
El delantero reconoció que no dudó de firmar por el equipo portugués: "Nada más saber del interés del Benfica, quise venir. Es un club grande, conocido mundialmente, con muchos aficionados, y no demoré ni un minuto a decidir venir para aquí".
El chileno explicó que siente especial admiración por el capitán Luisão, al que define como "un histórico", y recalcó que su objetivo ahora es ir "partido a partido".
Castillo, de 25 años, regresa al fútbol europeo, donde jugó entre los años 2013 y 2016, cuando formó parte del Brujas, el Mainz 05 y el Frosinone.
"Llegué joven y un poco inmaduro", reconoció sobre su primer periplo en Europa, pero destacó que ahora está "al cien por cien" y llega "con la idea de jugar y ayudar al equipo en lo que necesite".
En las dos últimas temporadas disputó 46 partidos con el Pumas, con el que consiguió 26 goles.