Manchester United y West Ham se enfrentaron este miércoles en la trigesimoséptima jornada de la Premier League, la penúltima fecha del campeonato doméstico inglés.
Los de Ole Gunnar Solskjaer buscaban una victoria para seguir soñando con la posibilidad de lograr un billete hacia los puestos de Champions League, pero el choque no comenzó de la mejor manera.
Después de unos primeros 45 minutos de juego muy igualados y competidos, el futbolista del United Paul Pogba levantó los brazos dentro del área tras un disparo a portería del combinado visitante.
El balón le golpeó en las manos y el colegiado no lo dudó: pena máxima. Michail Antonio engañó a David de Gea y transformó el penalti para que el West Ham se fuera al descanso por delante en el electrónico.