Takefusa Kubo es una de las comidillas de esta Copa América 2019. El anuncio de su fichaje por el Real Madrid antes del inicio de la cita ha hecho que todas las miradas recaigan sobre el joven nipón.
Todos sus partidos, de ahora en adelante se mirarán con lupa. Quizás fue el motivo por el que al nuevo 'merengue' se le vio un poco ansioso en los primeros minutos del encuentro.
Tras lograr asentarse en el terreno de juego, el menudo nipón dio algunas muestras de su calidad. Si bien es cierto que su primera mitad fue algo gris, dejó a todos boquiabiertos con un bonito caño.
Intentó con ahínco las jugadas individuales, pero nunca tuvo la chispa necesaria para culminarlas. En la segunda mitad Chile cedió el control del esférico a Japón y ahí se vio al mejor Kubo.
Takefusa demostró tener una gran visión de juego con varios balones en profundidad que su compañero Ueda no su aprovechar. Incluso él mismo pudo haber marcado un gol.
Recibió el balón fuera del área e inició una carrera entre jugadores chilenos que le llevó hasta el área pequeña. Una vez dentro, no pudo sortear a Arias y acabó mandando el balón fuera.