Para James Wilson, cualquier opción de salir cedido al Reading cayó en saco roto. Al cuadro inglés ya no le interesa mover ficha por él, menos aún cuando el ariete de tan sólo 21 años acaba de lesionarse la rodilla en el Derby County.
El Manchester United, su club propietario, se vio obligado a traer de vuelta al jugador tras su grave percance, poniendo fin al acuerdo de cesión. Ante esta situación, el Reading se lo pensó mejor y buscará otra opción para su ataque que pueda suplir sus carencias en esa posición.
El club del Championship no atraviesa su mejor momento en la competición. Con tan sólo 12 puntos se sitúa a las puertas de los puestos de descenso y tan sólo consiguió acumular tres victorias.