El equipo azulgrana vio cómo se le escaparon los tres puntos en ocho minutos de magia 'granota'. El partido pasó del 0-1 al 3-1 y Busquets considera que el Barça no merecía tanto castigo.
"Creo que fue un partido muy igualado. El resultado ha sido excesivo", explicó en zona mixta ante los medios que cubrieron el partido. "Poca explicación hay", respondió cuando le preguntaron sobre la clave del partido.
"Hicimos lo más difícil, que era ponernos por delante... pero nos dieron un arreón que nos hizo daño. Ellos juegan con mucha gente arriba y en uno de los goles no pudimos ganar el segundo balón. Íbamos líderes y estábamos en una buena racha", añadió.
Por último, no quiso comparar este choque al de Praga: "Todos los encuentros se tienen que analizar de manera individual e intentar corregir. No es fácil... también hay oponentes y cada partido es un mundo".