El Saint-Étienne acaba con la rebelión de los modestos

Era el Épinal una de las sorpresas de la Copa de Francia, pero su destino ha sido el mismo que el del Belfort, el otro equipo no profesional que había alcanzado los cuartos de final.
Pero nuestros héroes, a diferencia de sus homólogos ante el Rennes, cayeron dando la talla. Con las botas puestas, como suele decirse. Porque mientras el Belfort sufrió un contundente 0-3, el Épinal logró mantener el suspense hasta el final.
Pese a ello, fue el Saint-Étienne el que dio el primer golpe. Era lo lógico, pero se hizo esperar. Fue Bouanga, en el 37', quien logró poner en ventaja a 'les Verts'.
Con ese resultado corto de 0-1 el partido se fue al descanso, y al cuarto de hora de la reanudación Camara hacía el segundo, con el que el partido parecía decidido, visto para sentencia.
Nada más lejos de la realidad. El Épinal, lejos de rendirse y dejarse llevar, de exponerse a ser goleado, se levantó, se sacudió el polvo y logró recortar distancias apenas tres minutos después, en el 62'.
Krasso fue el jugador que hizo el gol que mantuvo viva la llama de la esperanza hasta el final. Una llama que no fue alimentada con claras ocasiones de gol, solo con garra y lucha.
Al final, victoria sufrida, pero no por ello menos esperada, del Saint-Étienne, que se une de este modo a PSG, Rennes y Olympique de Lyon en semifinales. Y serán los rojinegros sus rivales en la penúltima ronda, en un partido que se disputará en el Stade Geoffroy-Guichard de Saint-Étienne.