Ya lo dijo Ernesto Valverde en rueda de prensa, el VAR no va a acabar con la polémica en el fútbol. De hecho, actualmente sucede todo lo contrario, se ha llegado a tal punto de crispación por parte de algunos clubes hacia el videoarbitraje que cada acción polémica es echar más madera al fuego.
El VAR avisó al colegiado de un posible penalti de Baba sobre Jordán. Un pisotón totalmente involuntario cuando el futbolista del Mallorca ya se había llevado el balón. Sin embargo, Gil Manzano apenas lo dudó y decretó pena máxima en la jugada más polémica del encuentro.
Los más puristas dirán que es un lance habitual del juego que no debería tenerse en cuenta. Cierto es que, para Jordán, el balón ya no estaba en juego. Es una acción interpretable, ya que el pisotón existe y es más que evidente.
Sin duda, fue un momento que determinó el choque y decantó la balanza en contra del Mallorca, que comenzó descarado el encuentro. La primera oportunidad clara tuvo color bermellón, en una jugada personal fabulosa de Kubo que finalizó en un error imperdonable de Lago Junior, que regresaba a la titularidad en Liga.
Pero si el Mallorca está ahí abajo es por algo, y lo demostró en el 0-1 del Sevilla. Saque de esquina botado por Banega, demasiados problemas en la salida para Manolo Reina y cabezazo de Diego Carlos, que volvió a poner su sello a un gol clave para los de Lopetegui.
Se vino arriba el conjunto balear, que gozó de otra buena ocasión en las botas de Budimir. El delantero croata, además, anotó un gol al filo del descanso que fue anulado por el fuera de juego más milimétrico desde la entrada del VAR al fútbol español.
La fortuna siguió sin sonreír al Mallorca, al que le sentó fatal el tanto de penalti de Banega. Son Moix se empezó a tomar a broma el VAR. El Sevilla siguió a lo suyo, sellando el último triunfo de la temporada y haciendo los deberes.
Reaccionó un Mallorca liderado por el coraje en ataque de Kubo, pero el gol que le podía meter en el partido se resistió. Finalmente, victoria sevillista que ha escocido en Son Moix, a la espera de saber qué hace esta jornada el Celta, que puede meter al Mallorca en descenso.