El FC Sion se ha impuesto al AC Lugano por dos goles a cero en el Stade de Tourbillon. Los tesinenses no supieron aprovechar la inferioridad numérica de su rival al ser expulsado el central del Sion Jérémy Taravel. El francés vio la primera amarilla poco después del cuarto de hora y al filo del descanso el árbitro le mandó a las duchas.
El Sion se adelantó a los 13 minutos con un gol que no está claro si fue del delantero centro local Moussa Konaté o del defensa central Fulvio Sulmoni. El zaguero suizo rozó un balón que fue a parar a la red de su equipo. De una forma u otra, el Sion se adelantaba.
En el 44 llegó el contratiempo para los locales: la expulsión de Taravel. El defensa cedido por el Gent vio la doble amarilla y fue expulsado. Facilidad para el Lugano, que tenía delante diez jugadores, entre los que había sólo un central: Zverotic, tras irse su compañero en la zaga.
El Lugano buscó sin éxito el tanto que equilibrase el encuentro. Cuando el partido agonizaba, de nuevo Konaté desesperó a los visitantes, que se tuvieron que conformar con la derrota.
El Sion, tercero con 48 puntos, viajará a Basilea para enfrentarse el jueves al campeón en una final anticipada de la Copa Suiza. El Lugano, cuarto (a expensas de lo que haga el Lucerna mañana) con 44, recibirá al Sankt Gallen el próximo martes.