El 'Black Lives Matter' es un movimiento que pretende enfatizar la lucha contra el racismo. En el fútbol, especialmente en el inglés, es ya una tradición hincar la rodilla en el césped justo antes del pitido para darle visibilidad a este gran problema que aún vive en la sociedad y el deporte.
Esta práctica ya se ha visto en Champions y Europa League este año, pero el Slavia Praga no se unió ni en la ida ni en la vuelta de su eliminatoria ante el Arsenal. Un gesto que no pasó desapercibido para los jugadores 'gunners'.
Estos sí hincaron la rodilla, al igual que el colegiado, mientras el conjunto checo se mantuvo abrazado en el semicírculo central. Lacazette, capitán y referencia en ataque, mantuvo fija la mirada, como desafiante, a solo unos metros.. No pareció gustarle nada la actitud del rival. Y se lo hizo pagar tras el pitido inicial.
Los 'gunners' golearon al Slavia por 0-4, con un doblete del delantero francés. Y, para muchos, la buena actuación del galo tuvo mucho que ver con su personal 'venganza' hacia los checos.