Arrancó fuerte el RB Leipzig. De hecho, siete minutos le bastaron para poner el primero en el marcador.
Sabtizer adelantó al RB Leipzig cuando el partido acababa de arrancar. Pero el VfL Osnabrück sacó pecho y se dispuso a ponerle las cosas difíciles al rival.
Dos minutos después, Amenyido dejaba de nuevo el partido en tablas. 1-1 y vuelta a empezar.
Klostermann ponía de nuevo por delante al RB Leipzig en el minuto 29. Y, de nuevo Sabitzer, apareció en escena para firmar el tercero. Su doblete le convirtió en el mejor jugador del RB Leipzig.
Con ese 1-3, el RB Leipzig se fue al descanso más tranquilo, con una renta por dos goles. No sabía que en la segunda mitad, el VfL Osnabrück le complicaría la existencia.
En el 73 recortó distancias Marcos Álvarez y siguió el VfL Osnabrück tratando de encontrar las fisuras al RB Leipzig. El equipo de Segunda apretó hasta el final. Los de Nagelsmann se llevaron la victoria por la mínima, un ajustado 2-3 y la sensación de que hay cosas buenas, pero aún hay trabajo por hacer.