Los tres jugadores que lograron llegar con vida a los diversos hospitales que han atendido la tragedia siguen siendo tratados en las respectivas unidades de cuidados intensivos.
Allan Ruschel fue uno de los primeros en ser rescatados del avión siniestrado. Sufre serios daños en la columna y los médicos prefieren ser cautos ante la posibilidad de daños neurológicos irreversibles y por tanto una posible paraplejia.
En el caso de Neto, el último en ser rescatado desde el fuselaje del avión, es el más grave de los tres casos. Sigue con un fuerte traumatismo craneoencefálico y su estado es reservado.
Las noticias sobre Follman tampoco son muy positivas ya que las primeras informaciones que llegan desde el hospital hablan de la amputación de una de sus piernas tras el accidente. El guardameta también sigue en cuidados intensivos.