El Inter de Milán ha sido uno de los equipos cuyo nombre ha sonado con más fuerza en este pasado mercado de traspasos. Los 'nerazzurri' obraron una de las grandes bombas de esta ventana: el traspaso de Christian Eriken.
Sin embargo, la entidad italiana no se conformó con la incorporación del danés y peleó hasta el último instante la llegada de otro delantero que no se cerró, la de Olivier Giroud.
Afirma 'TuttoMercato' que el francés no fue el único pretendido por el Inter, ya que estuvo a punto de firmar al ex futbolista del Valencia Simone Zaza, que se encuentra en el Torino.
Como apunta el medio citado anteriormente, los de Antonio Conte pudieron incorporar al atacante de 28 años el último día del mercado, pero los 'granata' frenaron las negociaciones.