El número de enfrentamientos consecutivos saldados con derrota ante su público se ha quedado en siete y el de derrotas seguidas en casa, en cuatro.
Además, el Valencia no ha conseguido puntuar en el actual campeonato de Liga hasta la disputa de la quinta jornada de competición.
La victoria ante el Alavés ha evitado, a su vez, el peor arranque de la historia, fijado en la campaña 1999-200, cuando perdió cuatro partidos y en el quinto solo empató.
Con el triunfo ante el equipo vasco, el Valencia cierra una racha de ocho encuentros sin ganar, puesto que tras imponerse al Eibar al final del pasado campeonato, empató ante el Getafe antes de sufrir las siete derrotas seguidas del último ciclo.