El buen momento que vive el Valencia en los últimos tiempos, con la clasificación a la final de Copa y la victoria en Europa League ante el Krasnodar, tuvo continuidad en Montilivi.
Los de Marcelino se alinearon esta vez con la suerte, después de que los cambios defensivos del técnico pusieran en cuarentena el triunfo 'che' una vez más.
En la primera parte, el Valencia ya mostró una gran puntería para ponerse por delante. Rodrigo, en estado de gracia, se inventó un pase de gol fastuoso para Guedes que el luso no desaprovechó para reencontrarse con su mejor versión.
El 0-1 reforzó el planteamiento de Marcelino, aunque el asturiano no contaba con las acciones a balón parado, con las que el Girona creó peligro de manera constante durante todo el choque.
En una de ellas, Ramalho enmendó su despiste en el 0-1 y firmó con un buen cabezazo su primer tanto en Primera para llevar el empate al marcador al descanso.
Tras el paso por las duchas, el choque siguió con alternativas y sin un dominador claro. Fue Parejo, con un bonito golpeo desde la frontal, quien pareció acabar con el gafe valenciano lejos de Mestalla, pero Marcelino echó demasiado atrás al equipo con los cambios y el Valencia sufrió.
Los problemas aumentaron para los visitantes con la segunda amarilla a Roncaglia, que terminó de tirar por completo para atrás a los de la capital del Turia.
En una nueva acción a balón parado, Stuani intentó rematar y Diakhaby cortó con la mano. El VAR dio el penalti y el uruguayo, infalible desde los once metros, parecía dar un punto a los de Eusebio, que lo perderían de la manera más cruel.
Ferran Torres, tras una recuperación polémica en la que pudo haber falta -el VAR dijo "no"-, regateó a Bono y en el último instante le dio los puntos que tantas veces se le han esacapado al Valencia esta temporada a los suyos.
Con la victoria, los 'ches' ven reactivada su lucha por entrar en la Champions, en tanto que el Girona ve frenada su buena racha y tendrá que continuar sufriendo y mirando a otros campos.