El Valencia sufrió pero consiguió la primera victoria posparón. Los de Celades, que habían perdido comba en la lucha por Europa, se bastaron de un gran Gonçalo Guedes en la primera mitad para batir a un Osasuna que plantó cara en la segunda mitad.
Guedes fue el metrónomo del Valencia. El conjunto 'che' mandó hasta que se le acabó la gasolina al extremo, que puso el diésel en la primera mitad para mandar un mensaje a los rivales: está muy vivo.
Vivió Rodrigo un 'dejà vú' tres días después de ver cómo le anulaban un gol ante el Real Madrid. También lo hicieron en Mestalla, si bien en esta ocasión el fuera de juego era suyo.
Pero Guedes no estaba dispuesto a dejar pasar una nueva oportunidad. Mientras los aficionados 'ches' reclamaban su suplencia en favor de Ferran Torres, el luso se reivindicó con un gol maradoniano, dejando atrás a cuatro rivales, para poner la primera piedra de la victoria.
No quedó ahí la exhihibición de Guedes en la primera mitad, que se sacó una asistencia de la chistera para que, esta vez sí, Rodrigo pudiese celebrar su gol.
Todo lo bueno del Valencia en la primera mitad, y lo malo de Osasuna, desapareció tras el descanso. Se cambiaron las tornas, Arrasate metió un triple cambio y transformó al conjunto rojillo.
Comenzó a llegar el cuadro navarro por las bandas, especialmente por la de Rubén García, y la defensa del Valencia comenzó a temblar cual flan. Pero no estaban atinados los atacantes rojillos de cara a puerta.
No pudo romper el cántaro Osasuna, que con la derrota se queda en tierra de nadie. El Valencia se queda a un solo punto del Villarreal, con quien se enfrentará el próximo domingo.