Patrik Schick fue, sin lugar a dudas, uno de los nombres propios de la pasada Eurocopa, en la que participó con República Checa. El delantero anotó un total de cinco goles en cinco partidos, cayó eliminado en cuartos de final, para ser, junto a Cristiano Ronaldo, el máximo anotador del torneo continental.
Ese momento dulce se ha alargado también en clave club. Con el Bayer Leverkusen, equipo en el que cumple su segunda temporada, ha anotado 16 goles y repartido una asistencia en 18 partidos jugados, de los cuales 15 han sido como titular.
Un rendimiento sobresaliente que le ha llevado estar en la agenda de los grandes equipos de Europa. Uno de los interesados es el West Ham, una de las sensaciones de la Premier (quinto en la tabla), que estaría dispuesto a pagar una millonada por el checo.
Y es que el 'Mirror' informó que los 'hammers' serían capaces de desembolsar casi 50 millones de euros por Schick, más concretamente 47,5 'kilos, una cantidad por la que el Bayer Leverkusen puede hacer caja. Y mucha.