La última gran apuesta del Sevilla, Youssef En-Nesyri, ya es uno más. Apenas llevaba 48 horas en la dinámica del equipo de Lopetegui, si bien hizo su debut, y nada más y nada menos que en el Santiago Bernabéu.
A poco menos de media hora para el final, tras unos problemas de Munir, le tocó entrar. Justo cuando De Jong acababa de firmar el 1-1. Y casi no había tocado el balón cuando Casemiro puso el 2-1.
No había tenido tiempo para mucho el ex del Leganés. Sin embargo, a uno para el 90' se quiso mostrar con una de sus cualidades: la conducción en carrera. Quebró a Militao, dejó atrás al bigoleador del Madrid y conectó un zurdazo que salió cerca de la escuadra.
No pudo rematar en posición muy cómoda, aunque ahí estuvo la posibilidad de ser ídolo en su acelerado primer día como sevillista.