El Chelsea tenía a Endrick convencido y reculó para no inflar el mercado

Endrick está firmado como nuevo jugador del Real Madrid para la temporada que viene, pero estuvo a punto de fichar por el Chelsea en noviembre del año pasado -la rúbrica con los 'merengues' se produjo el 15 de diciembre, un mes después-. No se trata de una filtración de la prensa, sino de una historia que contaron él mismo y su padre en una entrevista con 'The Guardian' que se ha publicado este domingo. La perla de Palmeiras llegó a verse con Thiago Silva y otros jugadores al poco de tomar Todd Boehly las riendas del proyecto.

"Estuve cerca. A mis padres les gustó de verdad Londres y todo el mundo habla muy bien de la ciudad", adelantó el futbolista. Douglas Sousa no apoyó del todo la historia por el frío que sufrió en Inglaterra: "Tengo que admitir que no me gusta el frío, pero a mi mujer y a Endrick, sí. A Endrick el gusta jugar cuando llueve. Total, que recibimos una invitación del Chelsea, del dueño, y fuimos allí a ver el club y el país".

"Vimos al Chelsea jugar contra el Arsenal -probablemente, el partido del 6 de noviembre que los 'blues' perdieron en casa, que es el que coincide con las fechas de las que habla Douglas- y vimos al entrenador, las instalaciones, a Jorginho, a César Azpilicueta y a Thiago Silva. Nos lo explicaron todo. Nos presentaron a la persona que nos iba a ayudar a asentarnos. Nos enseñó la casa en la que íbamos a vivir, el colegio en el que Endrick iba a estudiar y la iglesia a la que iríamos. Todo iba bien con nosotros y el Chelsea", continuó.

"No puedo decir que al 100% porque no habíamos firmado nada, pero el acuerdo estaba cerrado. Ya me había hecho a la idea de que iba a vivir en Londres con ese frío. Pero, por la noche, el representante de mi hijo llamó y dijo que el dueño del Chelsea se había echado atrás porque el precio que habrían pagado por Endrick inflaría el mercado. Eran 60 millones de euros por un chico de 16 años que llegaría 2 años después", hiló.

En el siguiente tramo de la entrevista, Endrick toma la palabra y se centra en repasar su humilde infancia. También elogia a sus padres por haber pasado un hambre que él nunca ha conocido gracias a su esfuerzo. Tiene el objetivo de aprender cinco idiomas diferentes, incluido el lenguaje de signos porque quiere comunicarse con gente sorda. De paso, recuerda algún episodio de insultos racistas cuando tenía tan solo 10 años. Dentro de unos meses, podrá hablar en el campo vestido con la equipación del Real Madrid.

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