Con más de 400 partidos en el Atlético de Madrid, Fernando Torres dijo adiós. El 'Niño' que ya es leyenda agarró el micrófono y todo el estadio Wanda Metropolitano se quedó en silencio para escuchar a su ídolo.
"Me gustaría mandar un mensaje de agradecimiento a mucha gente. Sois muchos los que me habéis ayudado a conseguir esto. Me gustaría empezar por todos aquellos que están en el tercer anfiteatro. En especial a dos personas: a Luis Aragonés, que nos enseñaron a marcar el camino. Este grupo sigue haciendo historia y estoy seguro de que lo mejor está por venir", comenzó diciendo Torres.
Entre todas las personas que quiso agradecer Torres, el delantero rompió a llorar cuando se acordó de su abuelo: "Me gustaría mencionar a mi abuelo. Me dio el regalo más grande: ser del Atleti. Quiero agradecir a mi famili que me acompañó a entrenar mientras hacia los deberes en el tren o en el autobús. Muchas gracias mamá por tanto esfuerzo. A mi padre, por enseñarme los valores que el Atlético luego me reforzó".
También le tocó el turno a su mujer, la cual no logró contener las lágrimas: "A mi me mujer que ha sido un pilar en mi vida, que siempre estuvo en el lugar y a mi lado y, sobre todo, me ha dado estos tres niños que son un tesoro. Me gustaría dar las gracias a todas las personas que me acompañaron y me aconsejaron en esto del fútbol, a mis compañeros, cuerpo técnico y toda la gente".
"He tenido la suerte de estar en el Atlético que siempre soñé. Estoy muy muy orgulloso de haber formado parte de este grupo. Gracias a todos. Ahora os dejo solos y os toca a vosotros. Este grupo ha ganado mucho menos de lo que merece", se refirió Torres a todo su actual equipo.
Para ir acabando, el 'Niño' agradeció todo el cariño de la afición: "Me he sentido el jugador más querido del mundo. Después de ganar este título, todo se queda pequeño por el cariño que me habéis dado. Hoy es el último día y es muy duro saber que es el final. Muchas veces nos preguntan por qué somos del Atleti y tenemos muchas maneras de contestar. Es difícil de explicarlo y me gustaría que recordáreis como os sentís hoy. Recordadlo cuando los de fuera quieren destruirnos".
"Os voy a pedir que cantemos el himno, que es lo más bonito del mundo, durante la vuelta al campo", acabó un emocionadísimo Fernando Torres.