Ahora el equipo verdiblanco apura sus opciones en una temporada que por instantes apuntó a memorable: victoria en el Camp Nou, contra el Sevilla, el Atlético, semifinales de Copa del Rey, bien posicionados en Europa League, tramos de juego brillantísimo... Ahora espera el Valencia en un duelo de alto voltaje.
Junior atiende a BeSoccer a principios de Semana Santa. Habla de sus lesiones, de lo que le queda al Betis, las facetas que debe mejorar, su recién estrenada paternidad, el sueño de disputar el Europeo Sub 21 con España, con la que ya debutó, el verano que ya asoma por la esquina... Reflexiones de un futbolista vital para el Betis. Palabra de Junior.
-¿Cómo ha sido la semana postderbi?
-Es verdad que estamos un poco dolidos, creo que merecimos algo más que la derrota. Al fin y al cabo tuvieron más efectividad y nosotros, errores impropios en nuestra área. Eso es el fútbol, el fútbol son goles, y si te marcan más, pierdes.
-¿Fue un reflejo de la temporada?
-Sí, fue más o menos lo que nos viene pasando. Si te pones a echar cuentas y números de los puntos que hemos perdido por no meter ocasiones, son muchísimos. Iríamos líderes si lo metiéramos todo. A seguir trabajando, quedan seis jornadas.
-Han llegado lejos en algunas competiciones, ¿faltó un poco?
-Ha faltado un poquito, muchos jugadores en ese tramo de temporada estuvimos lesionados, un puntito de creérnoslo, de ir a cada campo y creer que somos capaces de ganar... y quizá un poco de suerte.
-¿Cómo se vive cuando se quiere ayudar y no se puede por lesión?
-Un poco frustrante, al final lo vives como un aficionado más. Muestras tu rabia, frustración, alegría, decepción... Es muy jodido cuando llevas todo el año ayudando. Estas dos lesiones han sido frustrantes. Ahora me encuentro muy bien, en las dos anteriores no tuve estas sensaciones. Somos un poco ciegos en estas situaciones los futbolistas. Cuando tenemos algunos problemas queremos estar, queremos estar, no nos damos cuenta y no hacemos caso al cuerpo médico. Y quizá fue ese mi error las veces anteriores, no hacer algo de caso. Querer estar para la Copa, para ayudar al equipo y tal. Se ha llevado esta vez con un poco más de cautela. Ahora estoy muy bien.
-En lo invidual, ¿temporada de ensueño?
-No, en lo invididual no puede ser de ensueño nunca. Me he perdido cuatro meses de competición. Son muchos, y cuatro meses muy importantes. Empecé jugando bien, haciendo goles, ayudando, con la Sub 21... Por culpa de estas lesiones, la catalogo como frustrante. Por suerte he vuelto, el míster [Quique Setién] sigue confiando en mí igual o más que antes de lesionarme. Por eso estoy tranquilo, tengo su confianza y si él quiere estoy para ayudar en estos partidos.
-Debut en el Villamarín con casi gol al Madrid, gol y asistencia en el Camp Nou... ¿cómo se vive ese inicio de carrera en la élite?
-[Sonríe] Quizá no entraba en mis planes antes de jugar en estos campos con estos rivales hacer gol o hacer estos partidos que me han salido. Gracias al estilo de juego que nosotros tenemos creo que soy importante para el ataque del equipo. Intento hacerlo lo mejor posible y que estas cosas se repitan mucho.
-¿Le faltaría mejorar en el plano defensivo?
-SÍ, siempre se me ha achacado el tema defensivo. Es algo que en los últimos años he mejorado mucho. El otro día fue una prueba de fuego, porque Jesús Navas lleva unos meses increíbles. Con respeto de él hacia mí y yo hacia él, salió bien. Siempre hay que mejorar, quizá sea mi punto más débil.
-¿Estudia mucho a los rivales? ¿Ve mucho fútbol?
-No veo mucho fútbol. Cuando termino de jugar y entrenar no suelo verlo. Si después de entrenar voy a casa, sigo viendo fútbol, me voy a dormir pensando en fútbol y me levanto viendo fútbol, me volvería un poco loco. Acaba de nacer mi hija y no tengo mucho tiempo de ver tele. No es que no me guste el fútbol, no me gusta verlo.
-¿Cómo está viviendo la paternidad?
-Algo muy bonito. Por suerte, tengo una hija que, como dicen los médicos, es una bendición. Come bien y duerme bien. Me deja descansar por las noches mucho. Soy muy afortunado.
-¿Cómo encara la recta final de la temporada?
-Yo la encaro con muchas ganas e ilusión. Aparte de los logros colectivos que tenemos, tengo uno individual: quiero estar en este Europeo. Quiero demostrar al seleccionador [Luis de la Fuente] que estoy listo para ir tras haber superado la lesión. Ante el Valencia lo planteamos como una final. Hay que salir a ganar, hay que ganar. Hay que demostrar a la gente que queremos ganar porque, si no ganamos, el tren de Europa se aleja un poquito y quizá se nos vaya.
-Quién le diría todo esto cuando de pequeño no le gustaba el fútbol...
-Pues sí... Al final todo ha sido un poco rápido, estoy aún en una nube. Sucede todo tan rápido y tan bonito que no me lo creo. Este año me ha tocado la recuperación y querer ayudar y no poder, pero en mi corta carrera me ha salido genial y espero que siga así.
-¿Se toma el partido del Valencia como una revancha?
-No, yo creo que al final lo que ocurrió en Copa, ocurrió en Copa. Creo que ellos no hicieron tantos méritos para llevarse la eliminatoria, sino que nosotros jugamos muy mal. Tuvimos aquí un 2-0 en el setenta y pico en casa que no se te puede escapar. Quizá el 2-1 te lo compro. Pero ya se te pone todo cuesta arriba con la ventaja que llevábamos. No lo considero una revancha contra ellos sino contra nosotros mismos.
-¿Tendrá un verano tranquilo?
-Espero que sea un verano lo más tranquilo posible. Que pueda ir al Europeo, que lleguemos muy lejos o que lo ganemos. Y nada, después disfrutar de los pocos días de vacaciones que tendré si todo sucede así. Y tranquilo.