Boca sufrió una inesperada derrota en la Bombonera ante Talleres (1-2). El cuadro de Miguel Ángel Russo no pudo hacer frente a los de Córdoba, que merecieron en todo momento el triunfo.
Pero eso fue lo de menos por lo que sucedió durante el encuentro. Y es que Fabra e Izquierdoz protagonizaron un encontronazo que acabó con el 'cafetero' llegando a las manos con su compañero.
No obstante, el colombiano, a su paso por 'Caracol Radio', dejó claro que no fue así. "La gente cree que a Cali le pegué una cachetada y en realidad no, fue con la mano, se la giro y quedó ahí".
"Nos hacen una pared por el lado mío, yo pierdo la marca y mi compañero me empezó a decir 'sigue la marca', gritando. Nos empezamos a gritar, nos desafiamos un poquito y terminé golpeándole la cara para que se gire para el córner. En el vestuario, me dijo: 'Donde me hubieses pegado una cachetada, después nos matábamos'. Somos compañeros, nos llevamos muy bien, quedó ahí", añadió.
Por último, Fabra reconoció que Russo se enteró al ver el resumen del encuentro. "Cuando ve todo el lunes, el martes nos reúne: 'Yo sé que aquí no pasa nada', dijo. Conoce a Cali cómo es, me conoce a mí. Es algo del momento y queda ahí. Nos dijo que ojalá no vuelva a pasar, que es calentura del momento y es fútbol", concluyó.