El árbitro se percató rápidamente de que algo malo estaba pasando, ya que paró el juego apresuradamente cuando vio como el jugador convulsionaba sobre el césped.
Mrisho Khalfan tenía 19 años y estaba sufriendo un infarto unos minutos después de marcar un gol. Las asistencias actuaron de forma inmediata y trasladaron al futbolista a un hospital.
Sin embargo, la ambulancia no contaba con las herramientas precisas para intentar la reanimación del joven, por lo que los paramédicos hicieron lo que pudieron con los escasos medios con los que contaban.
Finalmente se confirmó la noticia. El jugador del Mbao no había podido sobrevivir al ataque. Un nuevo palo para el fútbol.
Otra muerte en el fútbol, Mrisho Khalfan de la Sub20 de Tanzania, murió desplomado en el campo de juego. Minutos antes había anotado un gol. pic.twitter.com/9naKRR9Ubm
— Vahoos Hernández (@Vahooos) 5 de diciembre de 2016