City-Chelsea: la octava final de Champions entre equipos del mismo país

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El fútbol inglés vivirá su gran noche europea con la final de Champions League entre Manchester City y Chelsea en Oporto. La Copa de Europa busca nuevo campeón y todo apunta a que el título volverá a marcharse a Inglaterra (como en 2019) en un duelo que enfrentará a dos de los clubes británicos más en forma de la temporada. Un duelo directo entre equipos del mismo país peleando por un trofeo continental. No es la primera vez que ocurre y en BeSoccer Pro profundizamos históricamente para presentar los datos más destacados de este peculiar duelo.
Será la primera final europea para los de Mánchester, mientras que los de Londres vivirán su quinta participación en una cita máxima de estas características teniendo en cuenta los diferentes títulos europeos existentes.
Inglaterra será el epicentro del fútbol en el Viejo Continente, pero no será la primera vez que equipos del mismo territorio se enfrenten por una copa de Europa. De hecho, será la octava vez que ocurra en Liga de Campeones y la decimocuarta en términos globales teniendo en cuenta también la actual Europa League.
El dato global es interesante: 14 de las últimas 58 finales europeas (24.13%) fueron entre equipos del mismo país.
En total, han sido hasta ocho las finales de la copa de Europa que han tenido rivalidades nacionales en el ámbito continental.
No parece el escenario más habitual, pero ha ocurrido en el 27.86% de las finales desde el año 1992.
España e Inglaterra son los dos países con más representación en este aspecto, ya que ambos han conseguido tener tres grandes encuentros de este tipo.
LaLiga se vio representada en el año 2000 con la victoria del Real Madrid ante el Valencia por 3-0 (aquella fue la primera final en la historia del torneo entre equipos del mismo país). Pero tuvieron que pasar 14 años para ver la siguiente, cuando el derbi madrileño vivió su versión más ferviente al enfrentar a Real Madrid y Atlético en la recordada final de Lisboa (1-1 y triunfo madridista en la prórroga por 4-1). Otro derbi capital fue el que se vivió dos años después, en 2016, en Milán, también con victoria blanca y llevándose el título en los penaltis tras el 1-1.
En las tres finales españolas estuvo representado el conjunto del Santiago Bernabéu y en todas ellas levantaron el título.
La Premier League es la otra gran protagonista. Su primera gran noche llegó en 2008, cuando Moscú acogió el duelo entre Manchester United y Chelsea con triunfo para los de Old Trafford en los penaltis tras el 1-1 del choque. Once años después, en 2019, el Wanda Metropolitano acogió el duelo británico entre Liverpool y Tottenham en una noche que nunca olvidará los de Jurgen Klopp, ya que consiguieron volver a ser campeones al batir a los de Pochettino por 2-0.
Las otras dos finales se reparten entre Italia y Alemania. En 2003, AC Milan y Juventus se enfrentaron por el máximo trono europeo, pero tuvieron que decidirlo todo en la tanda de penaltis tras el 0-0. Los 'rossoneri' sonrieron aquella noche. La Bundesliga también tuvo su cuota de protagonismo en 2013, cuando el Bayern de Múnich vencía al Borussia Dortmund casi sobre la bocina por 2-1 con el gol de Robben.
Ahora, en 2021, Inglaterra vuelve a brillar y el próximo campeón será inglés. Manchester City y Chelsea pelearán por conseguirlo en Oporto.
Ha ocurrido en seis ocasiones, con España e Italia como máximos representantes. El porcentaje es menor respecto a la Champions League, pero no por ello menos importante, ya que pudo verse en el 20.6% de las ocasiones.
Italia firmó la primera final de la copa de la UEFA con representación del mismo país. En 1995, en un desenlace que todavía se resolvía a doble partido, el Parma conseguía vencer a la Juventus por un global de 2-1. Tres años después, ya con el formato actual de partido único, el Inter de Milán de Ronaldo Nazario conseguía batir a la Lazio con un claro 3-0.
España tiene también peso en este apartado. La primera final española (todavía bajo la denominación UEFA) llegó en 2006, cuando el Sevilla conseguía ser campeón ante el Espanyol, pero tuvieron que llegar hasta la tanda (fue la primera final española en resolverse así, en Europa), tras el 2-2. La siguiente llegó cinco temporadas después, en 2012, cuando el Atlético de Madrid goleó y batió con un claro 3-0 al Athletic Club de Bilbao.
Portugal (en 2011, ya con el nombre de Europa League) con el Porto campeón, tras ganar 1-0 al Sporting de Braga, e Inglaterra (en 2019) gracias a la goleada del Chelsea ante el Arsenal 4-1, también tienen su hueco en la historia del fútbol europeo.
En 2010-2012 se disputaron dos seguidas con estas características. Con países diferentes (Portugal y España), pero con la máxima rivalidad nacional expuesta al foco continental.
¿Se refleja la igualdad entre equipos del mismo país en un partido de este calibre? Lo cierto es que en el 33.33% de todas ellas estos enfrentamientos se resolvieron más allá del tiempo reglamentario. Es decir, acabaron en empate.
En estos duelos destaca España, ya que de las últimas 58 finales de torneos europeos el fútbol español tuvo doble representación, con duelos directos entre españoles, en cinco de ellas.