Flamengo no pudo contar con su gran estrella durante los últimos quince minutos de partido y, aún así, se las apañó para mantener el resultado por la mínima y asegurar los tres puntos.
Gabigol vio la tarjeta roja directa cuando cuando el reloj marcaba el '76. Cuando se dirigía a los vestuarios, el delantero caldeó aún más el ambiente entre todos los abucheos que recibía.
Levantó su mano derecha y comenzó a señalarse los cinco dedos uno a uno, recordando que Flamengo le había marcado cinco goles a Gremio hacía menos de un mes en la semifinal de la Copa Libertadores.
17 de noviembre de 2019