El equipo, fundado hace sólo cinco años, tumbó al Spartak de Moscú en las semifninales de una Copa Rusa donde se coronó venciendo al Avangard en la final por dos goles a uno.
Sin embargo, el destino se cebó con un Tosno que firmó dos descensos consecutivos y está al borde de la desaparición, si no presenta garantías económicas antes del próximo 14 de junio.
Tras una mala temporada en el campeonato doméstico, el modesto equipo de Leningrado descendió a Segunda División cuatro días después de besar la gloria en la Copa Rusa.
Días después, el Tosno volvió a descender por no tener licencia por motivos económicos y deberá presentar avales para competir en Tercera División y evitar su extinción.