El centrocampista guipuzcoano, uno de los cuatro futbolistas de LaLiga que disputó todos los minutos de la primera vuelta, ha trabajado en un grupo en el que no han estado Óscar de Marcos, que se recupera de la operación de tobillo a la que fue sometido en diciembre, Unai Simón y Gaizka Larrazabal.
El portero sigue restableciéndose de las paperas que le aquejan desde el pasado fin de semana, y que muy probablemente le harán perderse el encuentro ante el conjunto celeste, mientras que el extremo no ha vuelto a entrenar con sus compañeros desde que tuvo que retirarse el martes por unas molestias físicas.
Quien sí se ha ejercitado con aparente normalidad, al menos en los primeros 15 minutos abiertos a los medios de comunicación, ha sido Raúl García. El navarro abandonó el miércoles el entrenamiento tras recibir un golpe en la pierna izquierda en uno de los partidillos organizados por Gaizka Garitano.
Tampoco ha trabajado a las órdenes del técnico los cachorros Oihan Sancet y Gorka Guruzeta, que jugaron con el Bilbao Athletic el partido aplazado de Segunda B frente al Haro. La plantilla bilbaína regresará al trabajo el viernes en Lezama en una sesión a puerta cerrada a partir de las 10.30 horas.