Ramírez, de 28 años, fue titular en la posición de extremo derecho en el 4-4-2 dibujado por el técnico Claudio Ranieri y no tembló en el 75', cuando se encargó de transformar un penalti cometido sobre Fabio Quagliarella.
Su gol completó la remontada de la Samp en el estadio Marassi de Génova contra el Udinese, después de que Manolo Gabbiadini igualara al borde del descanso un tanto inicial del macedonio Ilje Nestorovski.
Con el 1-1 en el marcador, el Udinese se quedó en inferioridad numérica por la doble amonestación al bosnio Mato Jajalo y sucumbió ante el segundo gol de la temporada de Ramírez, después del tanto endosado al Lecce el pasado 30 de octubre.
Fueron tres puntos que dieron aire a la Sampdoria, que llevaba más de dos meses sin ganar en casa y que abandonó la zona de descenso para colocarse decimosexto, con doce puntos, a tres unidades de distancia de la zona roja.