Giovinco comanda la humillación de Toronto a New York City

Giovinco, que llegó a los 11 goles en lo que va de temporada, brilló en el juego ofensivo del Toronto FC que con marca de 43 puntos (12-7-3) vuelve a quedarse líder solitario, con cinco puntos de ventaja sobre el Fire de Chicago.

Aunque el marcador no se inauguró hasta el minuto 32 con un disparó de pierna izquierda de Giovinco que sorprendió al portero Sean Johnson, que tuvo una pobre actuación, especialmente a la hora de anticiparse a los disparos del delantero italiano que fue su bestia negra.

La primera parte concluyó con la mínima ventaja del Toronto FC y en la segunda el delantero español David Villa tuvo la oportunidad de haber conseguido el gol del empate, pero el portero Alex Bono reaccionó bien con una gran intervención a su disparo desde dentro del área.

A partir de ese momento toda la exhibición fue de nuevo para el Toronto FC que vio como a los 67 minutos de nuevo, Giovinco, en un tiro libre sorprendió una vez más a Johnson que se lanzó tarde a por el balón que entró por el ángulo superior derecho de su marco.

Pero faltaba todavía completar la exhibición goleadora del equipo canadiense con el delantero internacional Jozy Altidore, que a los 75 minutos de penalti ponía el 3-0 y el joven Raheem Edwards cerraba la goleada con el 4-0 a los 82.

De nuevo, el New York City, ya sin Villa en el campo, que fue el gran derrotado individual en el duelo de goleadores con Giovinco, el argentino Maxi Moralez falló un penalti al tirar el balón alto, y dejó al New York City con el segundo partido en lo que va de temporada sin poder marcar.

El anterior se dio en la jornada inaugural cuando perdieron por 0-1 ante el Orlando City.

La derrota dejó al New York City en el tercer lugar de la Conferencia Este con marca de 37 puntos (11-4-7), seis puntos por detrás del Toronto FC.

Mientras que Giovinco, de 28 años, llegó a los 50 goles como jugador de la MLS después de haber disputado 78 partidos, y se convirtió en la gran figura del encuentro que se disputó en el BMO Field de Toronto, ante una asistencia de 29.203 espectadores.

El partido cerró la vigésimo primera jornada de la MLS que reanudó la competición tras el paréntesis que tuvo con la celebración de la decimocuarta edición de la Copa Oro que el pasado miércoles ganó Estados Unidos por sexta ocasión al imponerse por 2-1 a Jamaica en la final.