Nuevo lío en Brasil. Goiás recibió a Atlético Mineiro en la cuarta jornada de la Liga Brasileña en un partido que acabó con empate a dos. Sin embargo, la noticia no estuvo en lo futbolístico y ocurrió tras el pitido final.
Y es que el equipo de casa acusó a Hulk de vandalismo al publicar que el brasileño le pegó una patada a una puerta del vestuario. Después de esto, el atacante salió en su propia defensa para desmentirlo.
"Increíble Hulk y la patada que dio en la puerta de entrada al vestuario del árbitro", dijo un encargado del club. El ex futbolista del Zenit y Oporto, entre otros, dijo que la información es falsa y pidió una retractación pública por parte de Goiás.
Según ha anunciado 'Globo Esporte', el futbolista "rechaza rotundamente" los comentarios que circulan en los medios de comunicación en su escrito. Exigió desmentir las informaciones en un plazo de 24 horas o sino, emprenderá acciones legales.