La Champions League siempre es una competición con una mística especial en todos los aspectos y da pie a grandes historias totalmente inesperadas.
Una de ellas pudo verse en el mítico Parque de los Príncipes, estadio del todopoderoso PSG, en el duelo entre el cuadro parisino y el Manchester United.
Y es que debido a las múltiples lesiones del equipo y al pésimo resultado de la ida, Ole-Gunnar Solskjaer no dudó en tirar de los más jóvenes para completar la convocatoria del duelo.
El noruego se llevó a numerosos chavales, conformando además un banquillo en el que había dos jugadores que a duras penas alcanzaban los 17 años.
Estos dos eran Mason Greenwood y James Garner, dos de las joyas del conjunto de Old Trafford, que vivirán en un par de días sendas dosis de sueño y realidad.
Ambos futbolistas saldrán marcados de París tras escuchar el himno de la Champions en unos octavos de final de la máxima competición, algo solamente al alcance de los elegidos.
Los dos talentos tienen ante sí un futuro más que prometedor, habiendo Greenwood anotado más de una veintena de goles en los equipos filiales del United y Garner siendo capitán de Inglaterra Sub 17.
Sin embargo, ese auténtico honor de vivir un duelo de Champions chocará de bruces con la realidad del día a día de ambos jugadores, que este viernes deberán regresar a su rutina diaria... incluido el colegio.
Tanto Greenwood como Garner deberán estar junto al resto de sus compañeros de aula, dispuestos a un día más de aprendizaje.
Y es que la educación está por encima de todo y cuando el deber de acudir al colegio aparece, no hay Champions League que valga.
6 de marzo de 2019