Este está siendo otra vez el verano de Antoine Griezmann. Ya lo fue en 2018, cuando finalmente decidió no marcharse al Barça, y en 2019, cuando puso rumbo definitivamente a la entidad azulgrana. Ahora, el francés es noticia justo por lo contrario: el club catalán se le quiere quitar de encima.
Los números no hablan de un fracaso del francés en el Camp Nou. Sin embargo, su buena segunda campaña coincidió con un curso muy irregular en el club azulgrana y muchos le critican que no haya sido capaz de brillar en los partidos grandes.
Pero su posible marcha no tiene nada que ver con su fútbol. El Barça necesita hacer hueco en sueldos y por eso le está ofreciendo al mejor postor. Se habló de un trueque con el Atlético que parece complicado y también se han producido acercamientos con equipos de la Premier o la Serie A.
Lo que parece claro es que saldrá, pero, según apuntó 'L'Équipe', no lo pondrá fácil. El círculo de amistades del futbolista francés confesó al medio que no habrá facilidades por parte de Antoine: "No aceptará condiciones para salir porque el Barça se encuentre en una situación económica complicada".
Un regreso al Atlético parecía encajar a la perfección, pero tanto Simeone como Cerezo han rebajado la euforia. También el Barça, que no quiere regalar a un futbolista con caché y por el que pagó muchísimo. Desea un trueque y además recibir algo más de dinero.
Una situación complicada y que tiene atado de pies y manos al club azulgrana, que sigue esperando movimientos de este tipo para poder certificar cuando antes la renovación o regreso de Messi.