La mano de Diego Forlán fue la encargada de encuadrar a los ingleses en dicho grupo. El nivel de sus parejas de baile
El Manchester City, uno de los cabeza de serie del sorteo, vuelve a estar entre las quinielas para levantar la 'Orejona', que este año vivirá su final en el Wanda Metropolitano.
El conjunto 'citizen', con Guardiola en cabeza y con un bloque más consolidado, aspira a que este sí sea su año en la máxima competición.
La temporada pasada el cuadro celeste cayó en los cuartos de final contra el Liverpool. Pese a haber arrasado en la fase de grupos y al Basilea en octavos, un gran Salah lideró a los de Klopp, que vencieron tanto en la ida como en la vuelta.
Hay ganas de revancha y de seguir creciendo en el City, que afrontará un grupo accesible pero que volverá a tener su prueba de fuego en las eliminatorias.
El Shakthar Donetsk es ya un viejo conocido de los ingleses en las últimas ediciones de la Champions. No en vano, es uno de los enfrentamientos más habituales de los últimos años.
El cuadro ucraniano peleó su clasificación para los cuartos de final ante la Roma el año pasado y estuvo a punto de conseguirlo. Eso sí, una vez más ha visto perder a su jugador emblema. En esta ocasión fue Fred el que se fue. Curiosamente, a Mánchester, aunque a la otra orilla. A última hora, Mourinho le 'robó' a Guardiola su fichaje.
Los bombos con rivales inferiores ofrecieron tregua para los 'citizen'. El Olympique de Lyon, que entró a última hora en la Champions, es un rival competitivo que ha tenido como gran fichaje haber podido conservar a Fekir en su delantera.
Un total de 23 goles y 8 asistencias logró el año pasado para ser uno de los mejores de la Ligue 1 y que le han tenido en el mercado como uno de los grandes atractivos hasta el final.
Se cierra el grupo con el Hoffenheim, algo más falto de experiencia internacional pero siempre competitivo. Además, pese a las malas expectativas por partir desde el último grupo, puede soñar con luchar por la tercera e incluso la segunda posición.
Además, supondrá el retorno de Pep Guardiola a Alemania, donde dirigió al Bayern Múnich entre los años 2013 y 2016.