Marco Reus, a sus 29 años y tras un largo calvario de lesiones, está viviendo una de sus temporadas más prolíficas. Parece que la relación entre el mal juego, los resultados negativos y la ausencia de Reus es evidente.
Aunque sus dos últimos partidos jugados acabaron en empate y uno de ellos terminó en eliminación copera, hay que poner las cosas en contexto. Y es que sin Reus, el Borussia Dortmund es otro.
Reus tuvo que ser sustituido al descanso de aquel encuentro. Problemas en el muslo. El marcador iba 1-1 (con gol suyo). Y el equipo de Lucien Favre no supo manejar la situación. Se desató la locura en la prórroga y en penaltis fallaron los 'borussers'.
Desde entonces, el todavía líder de la Bundesliga ha empatado dos partidos, ha perdido otro y ha ganado, no sin sufrimiento, otro. La derrota llegó en el escenario más inoportuno: en la ida de octavos de Champions frente al Tottenham. En Wembley cayeron 3-0.
"A él le gustaría estar, pero tenemos que hablar con el médico. Tenemos que ser sensatos", dijo Favre acerca de la presencia de Reus ante el Augsburgo. No se descarta, ya que empezó a entrenarse con el grupo esta semana, pero está difícil.
Y sin Reus, máximo goleador del Borussia Dortmund en la Bundesliga (13 tantos con Alcácer), hace más frío.
7 de diciembre de 2018