La conclusión de la última Champions trajo la bomba de Cristiano: "Fue bonito jugar en el Madrid". Misteriosa frase que desembocaría en rumores y, semanas después, en su marcha a la Juventus de Turín, pero, pese a avisar tras la consecución de la 'Décimotercera', el vestuario pensaba que el cinco veces Balón de Oro se quedaría en la capital española.
"Hacíamos apuestas en el vestuario cuando salió el rumor de Cristiano sobre si se iría o no. Estábamos seguros de que se quedaría, pero cada uno hace sus elecciones de vida. No pensé que él se fuera a ir ni tampoco que se fuera a marchar Zidane", explicó el centrocampista croata.
Hablando de Cristiano, y como posible sucesor suyo para el Balón de Oro de 'France Football', Modric recalcó sus diferencias con el portugués, sobre todo fuera del campo: "Soy una persona más tímida y reservada. No aprecio la sobreexposición en los medios, no me interesa mucho ir mucho más allá en esta área".
"Cristiano está a otro nivel de fútbol y por ello es normal que lo esté también desde el punto de vista mediático, pero yo prefiero la sencillez", añadió, dejando otra lección de humildad al verse a "otro nivel" respecto al futbolista portugués.
Cerrando el 'tema Cristiano', Modric destacó que mantiene una gran relación tanto con él como con 'Zizou': "Hemos vivido momentos irrepetibles. Voy a echar de menos a los dos como profesionales y como personas. El éxito nos ha unido"
En esa comparativa con su ex compañero no faltó la pregunta del millón... la del Balón de Oro. El croata reconoció que ha vivido su mejor año, pero no quiso entrar a valorar si merece o no el galardón: "Siendo honesto, no me gusta hablar así y decir: 'Sí, yo merezco el Balñon de Oro'. Lo importante para mí es estar en el campo como estos últimos meses, ya que este 2018 fue el mejor año de mi carrera. Mi objetivo es continuar a este nivel".
Por último, Modric, que reveló recientemente que le habría encantado jugar con Zidane, dejó palabras para el que apunta a ser uno de los mejores -si no el mejor- jugador del mundo en unos años: "Recuerdo cuando Subasic, mi compañero en la selección, me hablaba de un jugador joven del Mónaco (Mbappé). Me decía: 'Hay un chaval que es increíble y que algún día será de los mejores'. Ya me hablaba de Kylian cuando aún no se le conocía... yo estoy seguro de que seguirá progresando mucho".