El derbi madrileño está a la vuelta de la esquina y todo el madridismo espera que su equipo sea capaz de profanar el Wanda Metropolitano, con el objetivo de mantener la persecución sobre el Barça.
Sin embargo, la presencia de Isco, que todavía está renqueante de la patada que le dio Waston en el España-Costa Rica de La Rosaleda, es incierta por el momento.
El Madrid no ha dado a conocer el estado físico del centrocampista malagueño y se mantiene el silencio médico sobre él. El conjunto blanco se juega mucho en LaLiga e Isco hará lo posible por estar en el Metropolitano.
De momento, los cuidados del Madrid están siendo los mejores. El del Arroyo de la Miel no participó en la sesión de entrenamiento del lunes y ya acumula su tercer día de descanso. Hay tregua para Isco.