Para el Barcelona cada partido de la Champions League será una final y no solo por la eliminación directa que se contempla en el nuevo formato, en las que los equipos no tendrán margen de maniobra.
Los azulgranas necesitan llevarse un cierre de temporada dulce para olvidar todo lo demás. Todo lo que no sea llegar a la final podría considerarse un fin de un curso nefasto.
El primer partido será ante el Nápoles. En la ida los 'culés' no pudieron pasar del empate y Frenkie de Jong saben que deberán dar más para poder estar en los cuartos de final.
"Conseguimos un empate a uno pero tendremos que hacerlo mejor porque el Nápoles es disciplinado", comentó el centrocampista ante las cámaras del propio club.
El holandés, además, asegura que el parón tras el final de LaLiga le ha venido bien a la plantilla: "Esta pequeña desconexión nos ha ido bien y hemos vuelto con energía. Las sensaciones son buenas".
August 4, 2020
Su estado de salud no ha sido el óptimo en las últimas semanas, pero él ya se siente recuperado. "Lesionarme me decepcionó, pero tengo que prepararme para el partido del sábado", expresó.
Sabe que su temporada no ha sido la esperada. En el Camp Nou se esperaba un rendimiento mucho mayor, pero estos partidos cruciales podrían ser su trampolín al estatus que le corresponde.
Arturo Vidal y Sergio Busquets serán baja para esta vuelta, por lo que Frenkie está ante su mejor oportunidad de enmendar su curso. Rakitic y Sergi Roberto tienen todas las papeletas para escoltarle.