Los 'hooligans' toman Bilbao y más allá antes de la final

Este miércoles, Tottenham y Manchester United disputan en San Mamés la final de la Europa League. Un partido que ha atraído a decenas de miles de aficionados ingleses que han sobrepasado las capacidades hoteleras de Bilbao. Tanto es así que se han acabado repartiendo por el litoral del Cantábrico.
Las cifras de la UEFA cuentan 15.000 aficionados de cada equipo, pero estas solo reflejan los que entran en el estadio. Después están los que no tienen ni planeado ver el partido en San Mamés, solo vivir la fiesta. Las autoridades locales hablaban de un total de más de 60.000 hinchas.
Esto ha provocado que además deen Bilbao, los seguidores de ambos equipos han tenido que alojarse en San Sebastián, Vitoria e incluso en Santander. A horas de la final, la cama más barata en la capital vasca estaba en 435 euros... y en un hostel con habitación compartida. Aena contaba con al menos 165 vuelos chárter específicos. A ello habrá que contabilizarle en el balance final los aficionados que hayan aterrizado en líneas regulares.
Ante este colapso, algunos llegarán a Bilbao a lo largo del día, pero no son pocos los seguidores que han decidido tomar un autobús desde otras localidades durante la madrugada para pasar la noche por las calles de la localidad vicaína. Y tristemente, como parte inherente al 'hooliganismo' y al alcohol, también se han producido incidentes.
La Ertzaintza ha tenido que actuar a lo largo de las últimas horas en varios puntos como en Donostia, donde un grupo de seguidores del Tottenham destrozó un par de semáforos. En Santander, un padre aficionado de los 'spurs' que se encontraba con su hijo en una cafetería se enfrentó a una cuadrilla de ultras del Manchester United. La tensión fue en aumento y acabaron por los aires varias mesas del local.
También hubo incidentes en Bilbao, donde se produjeron enfrentamientos entre varias decenas de hinchas del club londinense y el Manchester United en la Parte Vieja de la ciudad. Según reportan los medios locales, los 'hooligans' hicieron volar vasos, mesas y contenedores hasta que aparecieron las fuerzas de seguridad para poner calma.
Además, en la Plaza Nueva, un inquilino de una vivienda tuvo que espantar a un grupo de aficionados que intentaban escalar a su balcón utilizando un andamio. Las imágenes se hicieron virales a través de las redes sociales y Ayuntamiento y Ertzaintza han hecho un llamamiento a la convivencia. Se recuerda que Bilbao es una ciudad hospitalaria, pero no tolerará el incivismo.