El Real Madrid negociaba el fichaje de Cuahtémoc Blanco cuando una durísima entrada de Ancil Elmock cambió el marco de un día para otro. El 8 de octubre de 2000, el ídolo mexicano tenía un cartel espectacular y el conjunto blanco tenía casi cerrada su incorporación, hasta que el México-Trinidad y Tobago lo mandó todo al traste.
La entrada le rompió los ligamentos de la rodilla derecha al ídolo de Tepito, que vio frustrado su fichaje por el Real Madrid. Por su parte, Elmock fue sancionado por tres meses y una multa económica.
17 años después, tras el duelo entre Trinidad y Tobago contra México, Elcock reclamó el perdón de Blanco. "Cuauhtémoc discúlpame. Nunca fue mi intención lastimarte. Te lo pido en nombre de mi familia", afirmó.
Tras la recuperación, el mexicano nunca volvió a ser el futbolista tan rompedor que pintaba en aquella época. Brilló en el Mundial de 2002 y logró desembarcar en España, pero ya muy lejos del Real Madrid y a un nivel que nunca se acercó al que mostró antes de la lesión.