El Real Valladolid comprobó de lleno la crueldad de la Primera División en su enfrentamiento ante el Alavés. Lo que eran sonrisas al comienzo del partido, con la vuelta a la Liga del equipo menos goleado y la aparición de Ronaldo en el palco, acabaron siendo lágrimas tras un contragolpe letal en el último instante.
Antes, pucelanos y vitorianos libraron un táctico combate de boxeo que pudo caer para cualquier lado. Los locales tuvieron algo más el balón y se movieron en el 'clinch', pero el Alavés efectuó los golpes más certeros, especialmente cuando entraron en contacto con el esférico Jony o Ibai.
La diferencia de calidad entre el Valladolid y el Alavés, mucho más asentado en Primera, rápidamente quedó patente. Mientras Keko ponía uno y mil centros sin acierto, su ex compañero Jony llevaba el peligro en Zorrilla como ya hiciera en el pasado 'play off' con el Sporting.
El exterior asturiano tendría la más clara de la primera mitad, con un golpeo desde la frontal que salió lamiento el palo izquierdo de Masip. También Guidetti y Calleri bregaron con clase y garra ante Kiko Olivas y Calero, mientras en la otra área a Enes Ünal le costaba mucho más generarse alguna oportunidad ante el buen marcaje de Ximo y Laguardia.
El choque tenía poco fútbol y estaba claro que se iba a decidir por una acción aislada o iba a acabar en empate. Tras el descanso, continuaron los avisos de Jony e Ibai, hasta que el Valladolid recuperó un poco el mando y también se creyó que podía ganar el partido. Fue con la entrada en juego de un efervescente Toni Villa cuando los locales ofrecieron sus mejores minutos y estuvieron cerca de hacerse con el partido.
Sin embargo, la más clara la volvieron a tener los visitantes, con un cabezazo de Guidetti a un metro de la portería que se fue directamente fuera con todo a favor. También Ibai saboreó el gol en un lanzamiento aparentemente inofensivo que Masip tuvo que blocar con problemas en dos tiempos.
El choque agonizaba y aún le daría una última oportunidad a Keko de redimirse tras su mala tarde. Recibió un esférico entre líneas, controló... y realizó un tiro muy flojo en el mano a mano ante Pacheco. El rechace, franco, tampoco pudo embocarlo el ex del Málaga, perfectamente tapado por la zaga vitoriana.
Cuando parecía que ambos firmaban un punto que no era del todo malo, el Valladolid perdió la cabeza en un último córner, Jony se subió en la moto y se recorrió toda la banda izquierda de Zorrilla y puso un pase atrás que sería letal para los de Sergio. No llegó Twumasi y casi mejor para los de Abelardo, porque Ibai, que había seguido la jugada, acababa con la resistencia de los locales en el 93' con un chut colocado con el interior, lejos del alcance de Masip.
Precisamente en el bautizo como propietario de un goleador como Ronaldo, su equipo volvió a evidenciar unos problemas en ataque impropios de un equipo de Primera. Y es que Jaime Mata ya no está para solventar la papeleta y nadie ha tomado su relevo en Pucela...