Icardi salva a un PSG adormecido

El PSG se ha relajado en la Ligue 1. Consciente de la superioridad con respecto al resto de sus rivales, se permite dejar descansar a sus máximas estrellas pese a la posibilidad de dejarse puntos.

Casi le pasó ante el Brest. No fue hasta la salida de un Mauro Icardi en estado de gracia cuando Tuchel pudo respirar. Y es que el argentino, tres minutos después de entrar al campo, dio la victoria al cuadro parisino.

Pecó de falta de puntería el cuadro dirigido por Tuchel. Llegó una y otra vez al área de Larsonneur. Pero no encontró el camino al gol el PSG, incapaz de conectar con un Cavani que se quedó en blanco en su vuelta a la titularidad.

No estuvo Mbappé, por descanso, ni tampoco Keylor Navas, que se lesionó en el calentamiento. Ello provocó además el debut de un Sergio Rico al que se le vio nervioso en algunos tramos del encuentro.

Llegó el primer tanto parisino en la recta final de la primera parte y lo hizo con suspense. El linier levantó la bandera una vez Di María marcó por presunto fuera de juego. Pero el VAR, que está para ayudar, aclaró al colegiado que el argentino estaba en posición legal a la hora de recibir el cuero.

El Brest no estaba dispuesto a vender barata su piel. Adelantó líneas en la segunda mitad, aprovechó la complacencia de una defensa del PSG demasiado sola y creó peligro en el área de Sergio Rico.

Apenas se vio el ataque del PSG hasta después del empate del Brest. Y es que el cuadro local, auspiciado por el resultado, se marchó hacia adelante para encontrar, por medio de Grandsir en una contra, el 1-1.

No lo vio nada claro un Tuchel que hizo los cambios de un tirón. Se marchó Cavani sin marcar, también un Verratti lesionado. Apareció en escena Icardi, y el argentino devoró el partido.

Cazó un balón suelto de un centro de Choupo-Moting, que salió a su vera, para poner el 1-2 con el que finalizaría el partido para devolver la sonrisa a la hinchada del equipo parisino y confirmar una jornada más que, pese a no tener a sus estrellas en el campo, tiene fondo de armario suficiente para ganar la Ligue 1.