Varios aficionados 'xeneizes' tumbaron las vallas de seguridad, según la versión del citado medio, y lograron ingresar a las instalaciones sin ningún tipo de control.
Uno de los caminos que da entrada a La Bombonera se convirtió en una pista de atletismo. Carreras, empujones y un caos difícilmente controlable por una policía desbordada.
Con la llegada de refuerzos, las fuerzas del orden pudieron reinstaurar la normalidad. Pero, para entonces y según 'Olé', muchos seguidores sin entrada ya se habían colado en el estadio pese a que el revuelo apenas duró unos minutos.
2 de septiembre de 2018