Tal y como cuenta el diario belga 'Het Nieuwsblad', el Seraing, equipo de la Segunda División del país, se encuentra en una situación complicada al ser investigado por la Federación tras los sucesos supuestamente acaecidos durante el mes de febrero.
La entidad ya confirmó algunos casos positivos por COVID-19 en enero, pero no fue hasta febrero cuando comenzaron los problemas. En la previa del duelo de Copa ante el Standard de Lieja, tres jugadores recibieron la llamada del centro de pruebas para confirmar sus positivos. Fueron puestos en cuarentena a pesar de que ellos recalcaron que nadie les había hecho la prueba.
Una situación que extrañó al Standard, que informó a la Federación en la previa del duelo pese a ganar el mismo por 1-4. Pese a ello, se abrió una investigación para tratar de esclarecer lo ocurrido.
Ahora, según este medio, se cree que Peter Kerremans, por entonces entrenador del equipo, fue el responsable de mezclar los nombres en las pruebas de varios jugadores, de ahí el error en las muestras de los protagonistas.
La investigación continúa y tanto Kerremans como Mario Franchi, el presidente, han sido citados a declarar. Si se decreta que se trató de un fraude, el club puede exponerse a una sanción grave...