El Tottenham estrenará su nuevo estadio el 3 de abril en el partido ante el Crystal Palace. Y hay mucha expectación debido al retraso que sufrieron las obras.
El club londinense no quiere que los socios hagan negocio con este acontecimiento y, según el diario británico 'The Telegraph' ha amenazado con retirar los abonos definitivamente a los que revendan la entrada.
Y es que se han llegado a ver ofrecimientos de entradas por las redes sociales para este encuentro por valor de 1.400 euros.
Tras ver estos precios, el Tottenham quiere evitar abusos en un día tan señalado y que los abonados creen una burbuja de los precios de las localidad aprovechando la alta demanda que hay.
"Los titulares de abonos de temporada o cualquier otra persona que venda sus entradas en plataformas de redes sociales y otros sitios web no oficiales infringen los términos y condiciones del club, por lo que se responsabilizan de que se suspendan sus cuentas", afirmó un responsable del club.
"La única forma oficial de transferir boletos es a través del intercambio de entradas o entrada compartida, que estará operativo en la fecha en que salgan a la venta", recordó.
Asimismo, el Tottenham también recordó que esta temporada se congelaron los precios de los abonos y que vendió 42.000.
El 9 de abril, los 'spurs' estrenarán su nuevo estadio en la Champions, en los cuartos de final y ante el Manchester City.