Dos temporadas de cesiones de por medio han hecho que James Rodríguez no dispute un partido oficial con el Real Madrid en casa desde el 14 de mayo de 2017, en la penúltima jornada de la campaña del último doblete. Una semana más tarde disputaría en La Rosaleda su último choque.
Así, con la lesión de Eden Hazard y la expulsión ante el Celta de Vigo de Luka Modric, Zinedine Zidane podría optar por tirar del colombiano. Y es que, a pesar de que no ha tenido oportunidades, las urgencias apremian.
A falta de nueve días para que se cierre el mercado de fichajes en España, James Rodríguez tiene más de un pie dentro del Real Madrid. La falta de ofertas final hace que Zidane pueda contar con el 'cafetero', al menos hasta enero.
La actitud del colombiano en la pretemporada ha sido encomiable. Pese a no contar con la confianza de Zidane, James Rodríguez se ha ido ganando al francés con trabajo, hasta el hecho de haber estado en las dos primeras listas de convocados.
De esta forma, el partido ante el Valladolid puede suponer la vuelta a casa de un jugador querido por la afición. Y es que en sus últimos compromisos en el Santiago Bernabéu, James Rodríguez salió ovacionado del campo.