Javier Aguirre, entrenador mexicano del Mallorca, dijo que la expulsión de Omar Mascarell al filo del descanso del choque ante el Betis (2-0) les "sorprendió y el partido se puso muy cuesta arriba", pero evitó justificar el tropiezo con una reflexión más que plausible.
Cuestionado por la roja que les dejó con 10 toda la segunda parte, no escondió el impacto de la misma: "La expulsión nos sorprendió y el partido se puso muy cuesta arriba. A partir de ahí, era complicado remar a contracorriente. La segunda parte fue un esfuerzo encomibale, pero era más factible que ellos se apoderaran del balón. Siempre lo hacen contra 11, contra 10... Más complicado. La jugada, ustedes están para analizarla. Con 10, se nos vino todo abajo".
Pero lejos de esconderse en el error arbitral, dio ejemplo con unas declaraciones que distan mucho de las que se suelen oír en casos así: "Tengo muy buena relación con el estamento arbitral. En mi caso, nunca jamás justificaré una derrota ni con la fatiga, ni con el arbitraje ni con la fortuna... Perdimos porque el rival fue mejor. Esa es mi filosofía desde que empecé en esto hace casi 3 décadas".
"No encontrarás ninguna declaración mía contra el trabajo arbitral porque no he encontrado hasta hoy ninguna declaración de un árbitro contra mi persona, ni contra un cambio que realicé mal ni contra un planteamiento táctico. Mientras haya un respeto mutuo, no me moveré de esto. Luego, el club tiene derecho de hacer lo que tenga que hacer como institución", añadió para terminar.
November 4, 2023