Italia está teniendo un grave problema para controlar en los partidos el racismo que se vive en muchos partidos. Justin Kluivert ha dejado muy clara su posición al respecto.
"Las personas que corean gritos racistas o hacen post racistas deberían ir a la cárcel", aseguró en los prolegómenos del partido en el que la Roma se midió al Atalanta.
Su compañero Juan Jesus fue uno de los que recibieron insultos en algunos de los partidos. "Creo que esto sería lo más simple", añadió el jugador 'giallorosso'.