Harry Kewell, uno de los mejores jugadores australianos de la historia, no parece que vaya a llevar el mismo camino como entrenador. El técnico, hasta ahora en el Barnet, ha sido despedido por sus pésimos números.
El ex jugador del Liverpool, de 42 años, fue incapaz de ganar uno solo de sus siete primeros partidos en el modesto equipo de la National League. Apenas consiguió dos empates y cinco derrotas.
"Quedó claro lo mucho que Harry Kewell quería tener un impacto positivo, pero los resultados y el flojo inicio de campaña han marcado esta decisión", dijo Dean Brennan, director de fútbol, de su destitución.
La del Barnet era la cuarta experiencia de Kewell como técnico tras dirigir a Notts County, Oldham y Crawley Town. En ninguna logró tener éxito.