El '9' regresa al Bernabéu

El Real Madrid cerró por fin un culebrón que ha durado años. Más de un lustro, si nos vamos a la primera vez que aquel atlético delantero con hechuras de Ronaldo Nazário sonó para la capital de España. Pero este lunes, Kylian Mbappé se convirtió oficialmente en nuevo futbolista del conjunto blanco, cuya camiseta vestirá por las próximas cinco temporadas.
Con Mbappé se cierra además un hueco en la plantilla que el verano pasado se dejó entreabierto. Tras la marcha de Karim Benzema a Arabia Saudí, a la directiva 'merengue' se le pidió desde fuera la incorporación de un delantero de renombre para que llevara el peso del ataque. Harry Kane parecía el más adecuado, pero el Madrid ni atacó por él; este se marchó al Bayern y los blancos ficharon a Joselu Mato.
Pese a tratarse de un ariete clásico, el español no posó en su presentación con el '9', sino que recogió el '14' que acababa de dejar libre Carlos Henrique Casemiro. En el Real Madrid, el dorsal por excelencia del delantero centro quedó desierto por primera vez desde que en la campaña 1995-96 comenzaron a asignarse por norma en el fútbol patrio. Hasta entonces siempre lo había llevado alguien, y normalmente de enjundia.
Lo llevaron jugadores como Luis Enrique, Davor Suker, Fernando Morientes y Ronaldo Nazário hasta la salida del brasileño. Entonces, el club decidió otorgarle el '9' a un canterano prometedor como era Roberto Soldado, de vuelta de su brillante cesión a Osasuna, y tras él lo portó un Javier Saviola que acababa de llegar gratis del FC Barcelona. Ninguno de los dos pudo darle todo el lustre, pero en 2009 empezó otra dinastía dorada.
Su siguiente dueño fue ni más ni menos que Cristiano Ronaldo. Aquel primer año de la segunda era de Florentino Pérez, la entidad respetó el '7' de Raúl González Blanco y le dio el '9' al luso, quien llegó a registrar la marca 'CR9' meses antes de su fichaje. En su primer año volvió a hacer grande este número con sus primeros 33 goles para el Real Madrid y, una vez se marchó el capitán, se lo dejó en herencia a un Karim Benzema que a su llegada tuvo que hacerse primero con el '11' que llevarían después Esteban Granero, Gareth Bale o Marco Asensio.
El legado de Benzema es mayúsculo, y eso que su fútbol pocas veces se correspondió con la esencia de su dorsal. El francés estuvo muchas veces más cerca del '10' que del '9', pero con este acabó haciendo 345 de sus 354 goles para el conjunto blanco, y también se apuntó 141 de sus 145 asistencias. En sus últimas cinco campañas, después de la salida de Cristiano, el francés subió su promedio anotador a un ratio de 32.4 por año, mientras que antes había estado en 21.3.
Mbappé aterriza en el Real Madrid como un futbolista total, siendo también mucho más que un delantero tradicional, un perfil que poco a poco se pierde y que de vez en cuando dignifican futbolistas como Joselu. El francés llega al Real Madrid habiendo metido 256 tantos con el Paris Saint-Germain y repartiendo además 94 asistencias. Justo después de uno de los mejores años de su carrera, con 25 en su pasaporte y el sueño de triunfar. El '9' vuelve a tener dueño y parece que por mucho tiempo.